Las pruebas, en las que participan 53 alumnos, 31 expertos, 9 jefes de expertos y 5 delegados técnicos, se llevan a cabo en dos días
Elegir al estudiante que sepa elaborar un cóctel de diez o que demuestre que sabe tirar una buena cerveza. Descubrir al alumno que monte la mesa más sobresaliente o al que cocine el menú más exquisito compuesto de solomillo, bacalao y postre. Escoger al joven que mejor trabaje la madera, la soldadura o la mecánica. Para seleccionar al mejor cocinero, camarero, soldador, ebanista o carpintero de Extremadura se están celebrando las Olimpiadas de Formación Profesional.
Se trata de una competición entre los alumnos que cursan estos estudios en la región para seleccionar al mejor de cada especialidad. Los ganadores de este certamen representarán a la comunidad autónoma extremeña en las Olimpiadas de la fase nacional que se celebrarán en Madrid el año que viene. Los primeros clasificados en este nivel pasarán a la competición mundial.
Tres institutos de la capital pacense (San José, San
Fernando y Virgen de Guadalupe) acogen desde ayer hasta hoy varios ejercicios prácticos de las distintas materias que imparten. En Badajoz participan 53 estudiantes, aunque a nivel regional se registran más de 100 aspirantes porque algunas de las pruebas (de peluquería, estética o diseño web) se celebran en el IES Universidad Laboral de Cáceres.
Los jóvenes han sido seleccionado previamente en los centros educativos en los que estudian. Durante este concurso han estado representados una veintena de espacios educativos de Extremadura.
La iniciativa pretende poner a prueba a los alumnos más destacados de Formación Profesional para sacar lo mejor de ellos. Por este motivo, el desarrollo de estas jornadas consisten principalmente en realizar ejercicios prácticos basados en situaciones reales relacionadas con las 18 especialidades evaluadas.
«Se trata de que los alumnos demuestren sus conocimientos y lo que han aprendido», explicó ayer Yolanda Sansón, directora del instituto San Fernando, momentos antes de inaugurar el evento en este centro.
Según afirmó Concepción Cajaraville, delegada provincial de
Educación, el objetivo es dignificar la Formación Profesional, darla a
conocer y fomentarla entre los jóvenes. «Se trata de ponerla en valor,
ya que ha sido una enseñanza que ha estado denostada. Ahora es una
apuesta firme del Gobierno regional», declaró.
Jurado
Las pruebas que los alumnos de estos estudios están realizando son
supervisadas y valoradas por un jurado que está compuesto por profesores
expertos de cada especialidad. Según especificaron varios miembros del
tribunal, la elección de los ganadores se llevará a cabo evaluando
diferentes factores y no sólo el resultado de las pruebas.
A nivel educativo la intención de esta competición es motivar a los
alumnos y que experimenten las sensaciones a la hora de trabajar ante
situaciones reales. «Este tipo de actividades son muy positivas para los
jóvenes porque para ellos es importante comprobar cómo funciona la
profesión a la que van a dedicarse. Les ayuda a empezar a amarla y verla
con la magnitud que tiene en la vida real. Además, aprenden a valorar
el trabajo bien hecho», apuntó Esther Ferrera, experta en Servicio de
Restauración y Bar y jurado de las pruebas de esta especialidad.
Los alumnos corroboran esta idea. Marta Muñoz, estudiante de esta
especialidad, se mostraba nerviosa momentos antes de comenzar los
ejercicios. «Me veo preparada y me gustaría ganar, pero no sé qué
pasará. Es un reto», aseguró. «La experiencia es única y merece mucho la
pena enfrentarse a ella. Se aprende mucho y conoces a gente con tus
mismas inquietudes», agregó Laura Antúnez, la estudiante de Servicio de
Restauración y Bar que representó a la región el año pasado en la fase
nacional de las Olimpiadas.
(noticia extraida del periodico Hoy)